La casa del balcón


[Con motivo del debate originado en la cuenta de Facebook No eres de Agudo… tras la publicación de una fotografía de la conocida como casa del balcón, se ha considerado oportuno recuperar esta entrada (publicada originalmente en Agudo Joven) a fin de que los interesados en el tema puedan ampliar su información sobre este edificio demolido en los años setenta del siglo pasado. Conmueve  la  morriña que transmiten buena parte de los comentarios realizados por los participantes, aunque ya nada se pueda hacer por algo que se destruyó hace casi cinco décadas. Paradójicamente, no recuerdo haber leído en este sitio ninguna opinión calificativa sobre dos de los edificios más emblemáticos de la localidad, situados en la misma plaza. La iglesia parroquial y el ayuntamiento viejo gozan del privilegio de estar incluidos en el Inventario de Patrimonio Cultural, realizado por la Junta de Castilla-La Mancha, aunque en la actualidad su estado de conservación deje mucho que desear así como el conjunto de reparaciones efectuadas sin tener en cuenta la condición y el aspecto de las obras originales].

     La imagen corresponde a un óleo realizado por Segu Piedras, partiendo de sus propios recuerdos y de una foto, portada en un programa de las fiestas de agosto.
     El edificio ocupó la actual travesía de Risco, un inmueble, propiedad del Ayuntamiento, en la acera oeste y una estancia pequeña, que se incorporó tras el derribo a una de las viviendas de la acera este. Se trataba de una casa grande y el tamaño de las diferentes dependencias estaba en consonancia con ella; nos han contado que disponía de cueva abovedada, de una sala muy grande y de una cocina, también amplia, con puerta de ingreso arqueada. Su trazado correspondía al tipo de morada utilizado por las familias de mayor poder adquisitivo en los siglos anteriores y, sin lugar a dudas, se construyó para ser ocupada por gente de esas características, pero la casa no se terminó. Desconocemos las razones por las que el propietario realizó un importante desembolso que nunca rentabilizó –no llegó a habitarla–, aunque se nos ocurren algunas opciones. Nos aseguraron que la construcción del balcón tuvo como única finalidad procurarse un buen lugar para contemplar las capeas, que se realizaban en la plaza, y pudo ocurrir que la celebración de los festejos no fue causa suficiente para decidir el establecimiento de un futuro hogar en una plaza que había tenido mejores tiempos. Otra posibilidad sería que  las nuevas técnicas constructivas (bóvedas, suelos hidráulicos, etc.) introducidas en la población en los años siguientes pusieran de manifiesto la ausencia de modernidad en el edificio.  Como quiera que fuera, la hoy añorada Casa del Balcón no resultó del agrado de sus dueños, convirtiéndose en alojamiento para varias familias que compartieron alquiler en un primer momento y, a medida que se deterioraba, en zona de almacenaje y estabulación de animales domésticos.     

Bibliografía:
Cabrera, I. y Penas, E. (1998): Agudo. Una villa de la Encomienda Mayor de Calatrava. Ciudad Real.
Mi agradecimiento a Segu Piedras por la imagen, y a María Salas, Maruja Blasco, Andrés Palacios y Socorrito Sanz por la información.